Las mejores historias para leer antes de acostarse
En un pequeño y tranquilo pueblo rodeado de montañas y bosques, vivía una niña llamada Sofía. Cada noche, después de cenar, se ponía su pijama favorito, se acurrucaba en su cama y esperaba ansiosa a que su mamá le contara una historia antes de dormir. A Sofía le encantaban las historias, pero tenía un pequeño secreto: ¡le gustaban más las historias mágicas, esas que la llevaban a lugares increíbles donde los animales hablaban y las estrellas se convertían en personajes!
Una noche, mientras se acomodaba bajo las mantas, Sofía le preguntó a su mamá:
—Mamá, ¿puedes contarme una historia sobre un lugar mágico, donde todo es posible?
Su mamá, que siempre tenía una sonrisa lista, asintió con entusiasmo y comenzó a contarle la historia de un lugar muy especial, el Bosque de los Sueños.
—Había una vez, en lo más profundo de un bosque lleno de árboles gigantes y flores que brillaban en la oscuridad, un lugar donde los sueños de los niños se hacían realidad. Este bosque era tan mágico que cualquier cosa que alguien imaginara podría ocurrir. En ese bosque, vivía una pequeña hada llamada Lila, que tenía el poder de ayudar a los niños a soñar cosas maravillosas.
Sofía se acomodó aún más entre las sábanas, con los ojos abiertos de par en par.
—Lila, el hada, tenía unas alas tan pequeñas y brillantes que podían hacer que se iluminara todo el bosque con solo un parpadeo. Pero lo más curioso de Lila era que ella no vivía en una casita de árbol, ni en una cueva secreta. Lila vivía en una flor gigante que solo se abría de noche, cuando el sol ya se había ido a descansar. Esa flor, llamada la “Flor del Amanecer”, tenía pétalos de colores que cambiaban cada vez que alguien soñaba un deseo.
Sofía, con la imaginación volando alto, no podía esperar para saber qué más ocurriría.
—Un día, Lila decidió emprender una aventura muy especial. Quería encontrar la “Estrella de los Deseos”, una estrella mágica que se decía que tenía el poder de hacer que cualquier deseo se cumpliera al instante. Para encontrarla, Lila tuvo que cruzar ríos que cantaban, montañas que se movían y bosques llenos de animales que hablaban.
En su camino, Lila encontró a un conejo llamado Beto, que estaba muy preocupado. El pobre conejo no podía encontrar su zanahoria favorita y no sabía qué hacer.
—¿Por qué estás tan triste, Beto? —preguntó Lila con su dulce voz.
Beto miró a Lila con ojos grandes y redondos.
—¡He perdido mi zanahoria dorada! Es la mejor zanahoria de todo el bosque, y sin ella no puedo dormir tranquilo. Cada noche me ayuda a soñar con grandes aventuras.
Lila sonrió, y sin pensarlo dos veces, agitó sus alas y susurró unas palabras mágicas. De repente, la zanahoria dorada apareció flotando frente a ellos, brillando como una estrella.
—Aquí está, Beto. Ahora puedes dormir tranquilo y soñar con lo que desees —dijo Lila, entregándole la zanahoria.
Beto saltó de alegría y agradeció a Lila con un fuerte abrazo.
—¡Muchas gracias, Lila! Ahora puedo descansar tranquilo y tener los sueños más felices.
Sofía sonrió, imaginando la alegría de Beto y la magia de Lila.
—Continuó su viaje a través del bosque, y a cada paso encontraba más animales que necesitaban su ayuda. Ayudó a una tortuga que había perdido su concha, a un pájaro que no podía encontrar su nido, y hasta a un ciervo que no sabía cómo cruzar un río. Lila no solo les daba lo que necesitaban, sino que también les enseñaba la importancia de ser amables y de ayudar a los demás.
A medida que avanzaba, Lila llegaba a la cima de una montaña cubierta de nieve, donde el cielo se encontraba con la tierra. Allí, entre las estrellas, vio algo brillante que se movía: ¡era la Estrella de los Deseos! Pero algo era diferente: la estrella no estaba sola, tenía una compañera, una nube de colores que se transformaba en arcoíris.
—Hola, Lila —dijo la Estrella de los Deseos con una voz suave y musical—. He estado esperando por ti.
Lila se acercó, emocionada, y preguntó:
—¿Puedes concederme un deseo, Estrella de los Deseos?
La estrella brilló aún más fuerte y contestó:
—Los deseos siempre se cumplen, Lila, pero no siempre de la manera que esperamos. El deseo más grande que puedes hacer es aprender a compartir tu magia con los demás.
Lila entendió en ese momento que lo que hacía feliz a los demás también la hacía feliz a ella. Ayudar a los animales del bosque no solo les traía alegría, sino que también le daba a Lila una satisfacción que no podía describir con palabras. Y ese fue su mayor deseo: ¡seguir compartiendo su magia con todo aquel que la necesitara!
Esa noche, Lila regresó a su flor del amanecer, contenta de saber que su verdadera misión era hacer el bien y compartir su bondad con los demás. Cada noche, cuando los niños del bosque dormían, ella les traía sueños felices y los ayudaba a soñar con cosas maravillosas.
Sofía, al escuchar la historia, ya se sentía cansada, pero también muy contenta. Mientras su mamá terminaba de contarle, Sofía dijo:
—¡Mamá, quiero ser como Lila! Quiero ayudar a todos mis amigos y hacer que se sientan felices. Quiero ser amable y compartir mi magia.
Su mamá la abrazó con cariño y le dijo:
—Eso es lo mejor que puedes hacer, Sofía. La verdadera magia está en ser amable con los demás, en ayudar y en hacer del mundo un lugar más bonito.
Y así, Sofía cerró los ojos, pensando en el Bosque de los Sueños, en Lila el hada y en todos los animales que ayudaba. Con una sonrisa en el rostro, se quedó dormida, sabiendo que al igual que Lila, ella también podía hacer el bien todos los días, no solo en sus sueños, sino también en la realidad.
Moraleja: Ayudar a los demás y ser amable es la magia más poderosa que podemos tener. Los sueños más felices llegan cuando compartimos nuestra bondad con el mundo.
Y colorín colorado, este cuento se ha acabado. ¡Que tengas dulces sueños llenos de magia y amabilidad!
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Radhe – Autor de Cuentos Cortos
¡Hola! Soy Radhe, el creador de Cuentos Cortos, un espacio donde los cuentos cobran vida y las imaginaciones de los niños pueden volar. Me encanta escribir historias mágicas y divertidas que llenen de alegría a los pequeños lectores. Aquí encontrarás cuentos cortos y de antes de dormir en español, cada uno acompañado de un audiolibro y hermosas ilustraciones.
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